CALENDARIO: "¡A la caza del huevo!"

Hola a tod@s:

El mes de marzo tenemos como protagonistas a Silver y... ¿Sonicman? Este es un personaje que salía en Sonic the Hedgehog (2006) compitiendo contra Sonic y Silver en misiones secundarias. Es un gran admirador de Sonic e intenta imitarlo al correr. 

Espero que disfruten de la historia que les tengo preparada y les deseo que pasen un feliz fin de semana.

Un saludo, Rinoa83.

Fuente: Sonic Channel

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Era un día estupendo de primavera en el reino de Solenna para la competición de Huevos de Pascua que se celebraba todos los años en los jardines reales de la Princesa Elise. Cada año, escondían cientos de huevos para que los niños del reino pudieran disfrutar de esta divertida cacería.

Cream estaba muy emocionada de poder asistir ese año por invitación de Blaze y Silver. Ambos habían llegado de sus respectivos mundos para pasar el día con su pequeña amiga. En su último encuentro, ésta les pidió amablemente que la acompañaran para que pudieran disfrutar de un día de descanso en su incansable lucha por el bien. La gata no pudo decirle que no con la carita con la que la miró, y ella a su vez miró a Silver suplicante para que no la dejase sola, pues no era de mucho socializar. 

"Muchas gracias, señorita Blaze, y señor Silver, por acompañarnos a Cheese y a mí en esta fiesta" dijo Cream sonriente. "Estoy segura de que se divertirán mucho buscando huevos."

"Aún no comprendo la finalidad de esta celebración" dijo pensativo Silver. "¿Qué tiene de divertido buscar unos huevos pintados de colores? ¿Se comen? ¿Recibes algún premio?"

"No seas tan materialista, Silver," dijo Blaze con los brazos cruzados en el pecho. "Tengo entendido que sí que hay un premio para quien encuentre más huevos. La princesa le otorgará una copa y un cheque regalo para comer en cualquier restaurante dentro del reino."

"Siendo así..." dijo el erizo plateado encogiéndose de hombros. "Otra cosa, ¿por qué tengo que ir vestido de conejito?"

Ambas se echaron a reír ante la indignación de Silver. La verdad es que se veía muy gracioso con esas pintas tan adorables.

"Bueno, le prometimos a Cream que la invitaríamos a pasar el día como ella quisiera. Además, todo el mundo está disfrazado porque es una tradición de esta fiesta. No seas tan cascarrabias."

"Pues tú sólo te has puesto unas orejas de conejo," dijo Silver, mirándola de soslayo. 

"Yo soy una princesa imperial y tengo que guardar la compostura. ¿Qué dirían mis súbditos si me vieran disfrazada?"

"No se iban a enterar porque eres de otra dimensión," dijo rechinando los dientes. "¡Y Cream ni siquiera necesita disfraz! ¡Parad de reíros!"

De pronto fueron interrumpidos por una voz que hablaba desde la megafonía del castillo. Todos los presentes escucharon atentamente el mensaje de la princesa: "Buenos días. Muchas gracias por venir un año más a la celebración de 'La cacería del huevo'. Como cada año, aquel que encuentre más huevos ganará la 'Copa Chao de Primavera' y recibirá un generoso premio. Les deseo una buena búsqueda y que gane el mejor." Un pistoletazo de salida marcó el inicio de la competición y todo el mundo se lanzó de cabeza a hallar los tan preciados tesoros de colores.

"Dense prisa con las cestas, sino nos quedaremos sin nada." Cream tomó de la mano a Blaze para que la acompañase, mientras Silver se quedó en medio del césped suspirando ante la perspectiva de pasar el día de aquella forma. Era un guerrero y no una niñera. Era bastante estúpido tener que buscar de forma manual los tan ansiados huevos. Con sus poderes podría hacerlos levitar a su cesta sin tener que mover un dedo. Pero Cream se había puesto furiosa y le dijo que eso era hacer trampas. No le quedaba más remedio que buscar como todos los demás. 

Después de un buen rato había conseguido hallar tres. Y acababa de divisar uno entre los matorrales cuando un borrón pasó a su lado corriendo a toda velocidad en dirección a él.

"¡Ey! ¡Ese huevo era mío!" gritó Silver. "¿Quién demonios te crees que...?"

"¿Acaso no me conoces? ¡Soy Sonicman!" dijo riendo socarronamente. "¡Soy más veloz que el rayo! ¡Nadie me puede igualar en una carrera! ¡Jo jo jo!"

"¿Eres un imitador de Sonic?" preguntó mirándolo de arriba abajo. "Mira, me da igual quien seas, pero devuélveme el huevo ahora mismo. Cream lo necesita más que tú. ¿No eres un poco mayorcito para estas cosas?"

"En el amor y en la guerra todo vale. Estoy enamorado de la belleza de la princesa Elise y no puedo perder la oportunidad de tomar de sus delicadas manos el trofeo. Así que no voy a devolverte nada, perdedor."

"¡¿Perdedor?! ¡Aaaah! ¡Esto es la guerra!" gritó indignado Silver. "¿Quieres pelea? ¡A ver si de verdad eres tan rápido como dices para ganarme recogiendo huevos! ¡El que pierda tendrá que darle todos los de su cesta al ganador!"

"¡No pienso perder, fracasado!" dijo al tiempo que salía corriendo imitando la pose de Sonic.

"¡Me estás hartando!" salió corriendo detrás de él. "¡No he dado la señal! ¡Eres un tramposo!"

Mientras, en otra parte de los jardines del castillo, dos robots colocaban con sumo cuidado varios huevos explosivos para los incautos participantes. El Dr. Eggman estaba eufórico por su pequeña broma. Esas alimañas se iban a llevar una desagradable sorpresa cuando metieran en la cesta sin ningún cuidado sus huevos y se quedaran sin ninguno. No podía dejar de reírse entre dientes y de frotarse las manos.

"Doctor Eggman, ya hemos acabado de colocar las bombas como nos ordenó," dijo Orbot mostrándole la cesta vacía. Cubot, sin embargo, ya había estallado al menos media docena por el camino.

"¡Je je! ¡Excelente!" replicó Eggman. "Cuando esos mocosos intenten llevarse algunas de mis divertidas sorpresas, estallarán en llanto. Será como música para mis oídos."

"¿Podemos ir a buscar huevos ahora que hemos terminado?" dijo con voz suplicante Cubot.

"Por supuesto que no," dijo irritado Eggman. "Si os ven se arruinará la sorpresa, zoquete."

Ambos robot mostraron signos de abatimiento y siguieron a Eggman para ocultarse a la espera de resultados. Se escondieron detrás de unos matorrales desde donde podía divisar todo el jardín.

Por su parte, Blaze, Cream y Cheese habían conseguido una gran cantidad de huevos de Pascua con unos diseños muy bonitos. Blaze miró por todas partes para tratar de localizar a Silver, pues llevaba un buen rato desaparecido y no lo veía por ningún lado. Seguramente habría volado hasta uno de los tejados del castillo para quitarse del medio. Había sido un gran error invitarlo a él, pues siempre había sido demasiado reservado y no le gustaba demostrar que tenía un lado tierno cuando se lo proponía, o sea, en muy contadas ocasiones. Como ella. Esto la hizo sonreír, pero tosió para evitar que se le notara. Ahora que lo pensaba, hubiese sido más efectivo invitar a Sonic. Con su velocidad hubieran conseguido barrer en la competición. 

"¡Guau!" exclamó sorprendida Cream. "Parece que al señor Silver le apasiona la búsqueda de huevos."

"¿Qué?" dijo asombrada Blaze. "¿Por qué dices...? ¡¿Silver?!"

El erizo iba a toda velocidad recogiendo una gran cantidad de huevos, yendo de un lado para otro, y casi sin aliento. Todo el mundo se estaba quedando asombrado por cómo esos dos se pegaban empujones, hacían que la gente se echase a un lado y parecía que estaban en una carrera de obstáculos más que en un día de celebración. 

"¡24! ¡25! ¡26!..." gritaba Silver.

"¡32! ¡33!..." resoplaba Sonicman a su lado. "¡Te... estoy... ganando... perdedor!"

Fue entonces cuando lo vieron. Un enorme huevo de color rojo brillante y dorado que los estaba llamando a gritos. Ambos se lanzaron como posesos hacia el tan ansiado premio. El Dr. Eggman estaba muy atento y más entusiasmado que un niño con un juguete nuevo. Todos los observaban desde lejos. Sonicman se puso en cabeza e impedía que Silver le sobrepasara poniéndole una mano en la cara. ¡Ya casi lo tenían! Y... ¡Sonicman se hizo con la victoria!

"¡Ja! ¡Nadie puede igualar la velocidad de Sonicman!" dijo triunfante metiendo el huevo en la cesta.

¡KA-BOOOOOOOOOOM!

Ante la mirada incrédula de todos los presentes, la cesta, y todo sus preciados huevos de Pascua, explotaron en el acto. Sonicman se había quedado en shock y con la ropa chamuscada, mientras que Silver no podía parar de reírse a carcajadas ante lo inesperado del momento.

"¡Jajajaja! ¿Ahora quién es el perdedor? ¡¿Eh?! ¡¿Eh?!"

"¡Silver the Hedgehog!" le gritó Blaze indignada. "¿Estabas compitiendo contra ese tipo? Se suponía que estabamos aquí para acompañar a Cream y ayudarla a recoger huevos, simplemente para relajarnos. ¿Y tú te dedicas a pelearte como un crío?"

"Es que verás, Blaze..." dijo sonrojado. "No es lo que parece. Yo estaba..."

El erizo se interrumpió en mitad de la frase al ver que Cream había localizado uno de los huevos trampa del Dr. Eggman y estaba a punto de meterlo en su cesta. Abrió los ojos como platos y apenas le dio tiempo a reaccionar para apartar a Cream de la explosión de su cesta. La alzó por el aire con su telequinesis y no hubo que lamentar males mayores, excepto que la conejita había perdido también su carga y no pudo evitar echarse a llorar.

"¡Aaaah! ¡No es justo!" lloró desconsolada. "¡Me... habían... costado... mucho... encontrarlos!"

"No te preocupes por eso, Cream," dijo Silver poniéndose a la altura de sus ojos y acariciándole la cabeza. "He recogido muchos. Puedes quedarte con ellos si quieres."

"¿De verdad?" dijo más animada. "¿No le importa?"

"Me he divertido mucho hoy. ¿No iba de eso esta celebración?" dijo guiñándole un ojo cómplice.

"¡Gracias, señor Silver!" dijo abrazándolo y dándole un beso en la mejilla. "¡Es usted tan bueno como el señor Sonic! ¡O mejor!" dijo riendo. "¿Puedo volar otra vez un ratito?"

"Creo que deberías llevar tu cesta a los jueces, Cream, para ver cuántos has conseguido," dijo Blaze sonriente. "Recuerda que no importa si no has ganado."

"¡Claro! ¡Vamos, Cheese!" dijo al tiempo que salía corriendo con su nueva cesta.

Tanto Silver como Blaze la vieron alejarse, y la gata se volvió hacia él para mirarlo con una sonrisa. 

"Vaya... pero mira quién se ha divertido esta tarde. El 'señor seriedad' y defensor a ultranza del futuro."

"No voy a negar que ha sido divertido a su modo," dijo Silver a la defensiva. "Aunque no siempre tengo que estar preocupado por lo que pueda pasar, tampoco es bueno rejalarse constantemente. Dejémoslo en un término medio." "Por cierto, si me disculpas..."

Silver se puso nuevamente serio y sobrevoló la zona ante la mirada inquisitiva de la gata. Lo sabía. Estaba seguro que el Dr. Eggman tenía que estar detrás de todas las explosiones de los huevos trampa. Por su culpa había hecho llorar a Cream, se merecía un castigo. Desde su posición podía localizar fácilmente los huevos de brillante color rojo. Con sólo un movimiento de sus manos, los hizo levitar en el aire y concentrarlos todos en una gran bola. Seguro que no se los veía venir... Cuando los tuvo en posición, los dejó caer como una lluvia multicolor explosiva. El científico y sus secuaces tuvieron que cubrirse al ver que todo estallaba a su alrededor. 

"¡Guaaaa! ¡¿Pero qué diantres?!" gritó Eggman. "¡Al Eggmóvil! ¡Rápido, idiotas!"

"¡Con eso aprenderás, Carahuevo!" gritó Silver. "¡Métete con alguien de tu tamaño!"

Cuando bajó, Cream salió corriendo muy contenta a sus brazos, portando una copa brillante.

"¡Muchas gracias, señor Silver! ¡Ha conseguido ganar la copa!"

"Gracias a tu rivalidad con Sonicman has conseguido reunir el mayor número de huevos," dijo Blaze. "Y, te hemos reservado el honor de escoger sitio para celebrarlo."

"Bueno, creo que deberíamos invitar a Sonicman," dijo encogiéndose de hombros. "Si no hubiese sido por él no hubiera recogido tantos," dijo mirándolo. "¿Qué dices? ¿Te apuntas?"

"¡Por supuesto! ¡Tanto correr me ha abierto el apetito! ¡Celebrémoslo con unos chili dogs!"

"¿Qué he hecho?" dijo Silver. "¿También imita a Sonic en sus gustos culinarios?"

"Tranquilo," dijo Blaze poniéndo una mano en su hombro. "Podemos ir más tarde a cenar los dos solos cuando dejemos a Cream. Yo invito, por lo bien que te has portado con ella."

"Me parece un plan genial, pero... antes me quitaré el disfraz de conejito. ¡Cómo lo odio!"