"Lo más probable," dijo cruzado de brazos y serio. "Bueno, es sólo que... ¿Sabes que día es hoy?"
"Er... ¿Miércoles?" dijo pensativo. "Es broma. ¡Felicidades, Sonic!"
"Hombre, pues gracias."
"No te preocupes, seguro que para antes de que acabe el día habré terminado de arreglarlo."
"Entonces, te dejo tranquilo para que puedas acabarlo cuanto antes. Mientras, creo que iré a hacerle una visita a Amy para ver si..."
"No creo que sea buena idea," dijo asombrando al erizo.
"¿Qué? ¿Y eso por qué?"
"Tengo entendido que tenía una cita."
"¿Sí? ¿Está enferma? ¿Tiene cita con el médico?" dijo riendo ante su propio comentario. "Vamos, ¿con quién está citada?"
"Para tu información es un chico," dijo serio. "Sin embargo, me dijo que no se lo comentase a nadie."
"Pero yo no soy "Nadie", así que a mí me lo puedes contar. ¿Lo conozco?"
"¿Por qué tienes tanto interés?" dijo mirándolo con una sonrisita. "¿Estás celoso?"
"¡¿Celoso yo?! ¡¿De Amy?! ¡Para nada!" dijo frunciendo el ceño. "Además, creo saber quién es. Seguramente es Shadow. Ahora se llevan muy bien esos dos. No sé cómo lo soporta siendo tan antisocial; aunque parecen tener mucho en común. Por otra parte, dicen que los polos opuestos se atraen..." decía susurrando entre dientes mientras golpeaba el suelo impaciente con el pie.
"Sonic, ¿estás divagando?" dijo alzando una ceja. "No creo que debas preocuparte demasiado por ellos. Son sólo buenos amigos como tú y yo. Pero si te quieres quedar más tranquilo, puedes ir a preguntarle."
"¿Quedarme tranquilo?" dijo enfadado. "Me da lo mismo con quien salga. No sé qué estás insinuando, pero no tengo ningún interés en meterme en la relación de Amy con "ese tipo"."
"Ajá."
"Te veré más tarde."
Sonic salió corriendo impelido a toda velocidad por las calles de Green Hill. Su humor ya no era tan bueno como el de aquella soleada mañana tras el comentario de Tails. No es que se sintiera molesto o celoso por que Amy saliera con otro chico, simplemente le dolía que hubiera escogido precisamente el día de su cumpleaños. ¿Acaso ya no le importaba lo más mínimo sus sentimientos? ¿No era ella la que suspiraba desde niña por él? ¿Dónde se había ido toda esa admiración y devoción? ¿Y su amistad? ¿Acaso un desconocido era más importante que él para haberse olvidado hasta del día que era?
Apretó los puños con fuerza. No quería ir a preguntarle, eso era caer demasiado bajo. Sin embargo, sentía un extraño malestar en el pecho que le oprimía los pulmones. Cerró los ojos con fuerza y sus pies se movieron solos, poniendo rumbo a casa de la eriza. Tenía que escucharlo de sus propios labios. Cuando llegó, se paró delante de la puerta con el puño en alto para golpear. Sin embargo, se empezó a sentir extrañamente débil y le temblaban las piernas. Jamás le había pasado algo así en toda su vida. ¿Por qué tenía esa debilidad en la boca del estómago y esa congoja en el pecho?
"Cálmate, Sonic," se dijo a sí mismo. "No te pongas nervioso y respira. Seguramente todo es un malentendido y Tails escuchó mal. No va a perderse tu cumpleaños por cualquier tipo que se le aparezca frente a su puerta. Amy no es así, es tu mejor amiga. Seguro que en estos momentos está preparando el almuerzo para celebrarlo. ¡Eso es!"
Llamó a la puerta con decisión y esperó a que Amy abriera, sorprendida.
"¡Sonic!" dijo alegremente. "¡Felicidades!"
"¡Gracias!" dijo abrazándola con fuerza. "¡Sabía que no podías haberte olvidado! Tails estaba totalmente equivocado."
"¿Qué?" se separó desconcertada. "¿Qué quieres decir?" "¿Qué te contó Tails?"
"Dijo que no era buena idea venir porque te estabas preparando para una cita," dijo riendo. "¡Cómo si te hubieses olvidado del día que es hoy!"
"Ah... eso," dijo mirándolo apurada. "Verás, es que..." "Sí que estoy esperando a alguien. Había quedado con él y me extraña que no esté ya aquí."
"No voy a caer en ese viejo truco, Amy," dijo con una sonrisa sarcástica. "¿Otra vez con tus novios imaginarios como Dexter? Sabes que soy incapaz de sentir celos."
"No," dijo seria. "Esta vez es de verdad. Tampoco le llamaría mi novio, pero si lo fuera, esperaba que te alegrases al menos por mí y no que te lo tomases a burla."
Sonic tragó pesadamente y sintió que le ardía la cara.
"No me estaba burlando, Amy," dijo mirando al suelo serio. "No era mi intención ofenderte, perdona. Pero, entonces, ¿con quién estás citada? ¿Lo conozco? ¿Es alguien de Green Hill?"
"Bueno, tú le conoces..." dijo avergonzada. "Yo me atreví a invitarlo a tu fiesta..."
"¿Tú qué?" dijo con enfado. "Si te refieres a Shadow... ¡Ahórrate aparecer por allí! ¡No le soporto! ¡Qué os lo paséis muy bien, como siempre!"
"¡Sonic!"
Amy se quedó muy sorprendida de ver cómo Sonic levantaba una gran polvareda cuando se marchó a toda velocidad sin dejarle explicarle siquiera con quién se había citado aquella tarde. Justo en ese momento había llegado su acompañante y la saludó con alegría. Sin embargo, se quedó muy serio al ver que la chica tenía los ojos brillantes como a punto de llorar.
"¿Sucede algo, Amy?"
"No, no..." dijo meneando la cabeza negativamente. "Es que Sonic acaba de estar aquí y hemos tenido una discusión. No sé si estoy de humor para ir a ningún lado, sólo quiero estar sola."
"Conozco lo suficiente a Sonic para saber que no estará mucho tiempo enfadado con lo que sea que haya sucedido. Si es capaz de perdonar a su peor enemigo, no creo que se resista mucho tiempo a la sonrisa de su mejor amiga. Mejor vamos a preparar las cosas que nos vamos a llevar, así despejarás la mente un rato. ¿Te parece bien?"
"De acuerdo," dijo con un largo suspiro.
Por su parte, Sonic fue aminorando el paso a medida que se alejaba de la casa de Amy. No tenía que haberle gritado de aquella forma; pero es que se sentía muy traicionado. En verdad había quedado con Shadow para verse y, como si fuese un favor, iban a pasar por su fiesta. No necesitaba su compasión, tenía muchos amigos con los que celebrar y no le importaba que tuviese otras prioridades. En realidad, ya no le apetecía celebrar nada. Tails estaba muy ocupado con el Tornado y Amy había quedado. Sus mejores amigos le estaban dando de lado en el día más importante de su vida.
Se sentó a descansar debajo de una frondosa palmera y se quedó mirando a la nada. La brisa marina le acariciaba suavemente en la cara y pareció serenarse un poco. Tampoco es que fuera tan grave no tener una gran fiesta como acostumbraba, y todavía le quedaban muchos otros amigos con los que pasar el rato. Se levantó de un salto más animado y se dirigió veloz a la oficina de los Detectives Chaotix. Desde fuera las luces parecían apagadas a través de las ventanas y había una nota pegada en la puerta. Sonic la arrancó para poder leerla. Decía así:
Hola, futuro cliente:
En estos momentos estamos en una misión, pero puedes dejarnos tu teléfono apuntado más abajo y te devolveremos la llamada en cuanto estemos desocupados.
Atentamente, Oficina de Detectives Chaotix.
Aquello era simplemente genial. Los Chaotix tampoco estaban disponibles para salir a tomar algo. ¿Acaso era una broma cruel del destino que hoy, de todos los días, sus amigos estuvieran tan ocupados haciendo otras cosas? Hizo una bola con el papel y le dio una patada bien lejos.
Empezó a caminar en dirección a la playa con los brazos detrás de la espalda y cabizbajo. Aquel era el día más horrible de su vida. Nadie parecía querer pasar con él su cumpleaños y sentía un gran nudo en el pecho. De pronto, sintió que alguien lo llamaba por la espalda. Era una pequeña voz infantil que reconocería en cualquier lugar. Cream lo estaba saludando alegremente y ambos se pararon en mitad del camino.
"¡Cream!" dijo animado. "¡No sabes la alegría que me da verte!"
"¡Muchas felicidades, señor Sonic!" dijo abrazándose a él.
"¿Qué haces tú por aquí? ¿Vas a tu casa?"
"Sí. Mi madre me pidió comprar unas cosas porque tenemos una invitada en casa muy especial. Queremos que se sienta cómoda mientras está con nosotras."
"Oh, entonces... supongo que estarán muy ocupadas con su visita," dijo algo decepcionado. "Bueno, saluda a tu madre de mi parte. Hablaremos en otra ocasión, ahora yo también estoy muy ocupado."
"Claro," dijo mirándolo con cara preocupada. "¿Se encuentra bien, señor Sonic?"
"Perfectamente," respondió con una sonrisa fingida.
No era verdad. No se sentía nada bien y salió corriendo ante la mirada atónita de la conejita al no despedirse de ella siquiera. Tenía un gran nudo en la garganta en aquellos momentos que le impedía emitir hasta un escueto adiós. Necesitaba estar solo y desahogarse. Así que corrió hasta la costa y se paró frente al inmenso mar que bañaba las costas de South Island. Tomó aire en sus pulmones y emitió un gran grito que resonó por toda la isla, luego se dejó caer sentado en la arena y metió la cabeza entre las piernas. No podía contar con nadie. Lo habían dejado completamente solo y no le importaba a nadie.
"Mira que trajo la marea, Omega," dijo una voz femenina a sus espaldas.
"Según mi base de datos, son algas comunes," dijo levantando un manojo de algas mojadas. "¿Qué tienen de especial para llamar tu atención?"
"¡No me refería a eso!" dijo exasperada. "Me refería a Sonic."
"¿A Sonic lo trajo la marea?" contestó desconcertado Omega. "No está mojado."
"Olvídalo," dijo cansada. "¿Qué haces tan solito, Azul? ¿No estás con tus amigos?"
"¿Cuáles amigos?" dijo serio. "¿Y qué hacen ustedes aquí? ¿Cómo es que no están en Station Square? Sé que viven allí y esto está un poco apartado para estar dando un paseo."
"¿Es que acaso una chica no puede pasar sus vacaciones en una isla tropical de los mares del sur? South Island es ideal para broncearse en esta época del año."
"Sonic."
Un intenso escalofrío le recorrió la columna vertebral al escuchar una voz a sus espaldas. Era al que menos quería ver en aquellos momentos. Se volvió con el ceño fruncido para ver a Shadow cruzado de brazos y mirándolo con su seriedad característica. Su sola visión le hizo revolverle el estómago y se levantó con los puños apretados. El corazón le latía fuertemente en el pecho y se contuvo de lanzarse contra él.
"¿Qué haces tú aquí?" le espetó con voz temblorosa por la rabia.
"Vine acompañando a Rouge y Omega," dijo tranquilamente Shadow. "Me pidieron que los trajese hasta aquí con el Control de caos. No tengo ningún interés en quedarme."
"Mentiroso," dijo con voz ronca. "Has quedado con Amy. ¡Lo sé todo!"
"¿De qué diantres me estás hablando?" dijo a la defensiva. "Creo que te estás imaginando cosas, Sonic. Será mejor que te tranquilices antes de hacer cualquier estupidez. No me temblará el pulso en darte una paliza aquí mismo."
"¿Ah sí?" dijo mientras era retenido por Omega. "¡Suéltame!"
"Ahora me vas a escuchar," dijo Shadow seriamente. "Hablemos a solas."
Omega lo puso en el suelo a la orden de Shadow y ambos caminaron unos cuantos metros para alejarse de sus acompañantes. Shadow se cruzó de brazos apoyado contra una palmera y Sonic se plantó delante de éste con los brazos cruzados en el pecho, también. Estaba esperando que le contase por qué lo había citado allí. ¿Qué quería contarle a solas?
"¿Por qué crees que me he citado con Amy?"
"Ella me lo dijo."
"¿Ella te dijo mi nombre y que había quedado conmigo?" dijo sorprendido. "Me extraña viniendo de Amy. No es una chica que se invente cosas y, sobre todo, con lo pesada que llega a ser hablando de ti."
"Bueno..." dijo dudoso. "No me dijo tu nombre, pero sí que había quedado con un chico que conozco y..."
"¿Pensaste automáticamente en mí?" dijo soltando una ligera risita. "Comprendo. Sé de dónde puede venir esa desconfianza, pero te la voy a aclarar de una vez por todas. Cuando fui al concierto de Hot Honey con Amy, fue porque ella misma me invitó. No tenía ningunas ganas pero, por no ser descortés con ella en el día de su cumpleaños, no tuve más remedio que aceptar su invitación. Admito que nos lo pasamos bien porque es una chica con una alegría contagiosa, pero claramente hubiese preferido que su acompañante fueras tú. Para la próxima vez, se más original con tu regalo."
"Para tu información, mi regalo era también original," dijo más relajado. "Tú u otros no lo entenderían. El pastel que encargué tenía el patrón de la superficie de Collision Chaos donde Amy y yo nos conocimos por primera vez en Little Planet. No fueron las mejores circunstancias porque la secuestró Metal Sonic, pero fue el inicio de nuestra amistad. Y tenía su foto enmarcada en un corazón para hacerle saber cuánto la queremos. Es una amiga muy especial, ¿sabes?"
"Entiendo lo que dices," dijo serio. "Amy sabe cómo llegar al corazón de las personas."
Justo en ese momento, el Tornado sobrevolaba por encima de sus cabezas y vieron como el biplano aterrizaba un poco más lejos de donde se encontraban. Tails venía con la cara descompuesta y llamando a Sonic mientras volaba en su dirección. Parecía asustado por algo.
"Tails, ¿qué te ocurre?" preguntó Sonic teniendo un mal presentimiento.
"¡Sonic! ¡Menos mal que te he encontrado!" dijo casi sin respiración. "Mira este mensaje del Dr. Eggman. Es horrible."
Tails le mostró su Miles Electric y reprodujo un mensaje de vídeo mostrando al Dr. Eggman sonriente desde su base. La que se veía al fondo de la imagen era... ¿Amy? El corazón empezó a latirle con fuerza en el pecho. Frunció el ceño y escuchó la desagradable voz del científico atentamente.
"¡Saludos, rata azul! ¡Feliz cumpleaños!
Mira qué sorpresa te tengo preparada aquí en mi base. Me puedes agradecer que te haya librado de ella. No dirás que el Dr. Eggman no es detallista con su némesis. Puedes tomarlo como un regalo de cumpleaños. ¡De nada!"
El vídeo terminó bruscamente y Sonic empezó a temblar de la rabia. No iba a consentir que le hiciera daño a Amy por su culpa. Tenían que rescatarla urgentemente antes de que le hiciera algo horrible a su amiga. Se volvió hacia Tails con decisión.
"¡Tomemos el Tornado para ir hasta la base de Eggman!" dijo furioso. "¡Rápido!"
"Nosotros también iremos a rescatarla," dijo Shadow. "Nos veremos allí."
"Gracias, Shadow," dijo asintiendo y poniéndose en marcha.
Ambos subieron al Tornado y Tails arrancó enseguida poniendo rumbo a la fortaleza del Dr. Eggman en lo más alto de la isla. Como era de esperar, tuvieron una cálida bienvenida esquivando láseres y badniks que estaban esperando su llegada. Sin embargo, el ataque no había sido tan agresivo como otras veces cuando se había enfrentado a él en el pasado. Bajó corriendo del avión y giró sobre sí mismo para derribar de un Spin Dash la puerta blindada de la base. Lo que vio lo dejó de piedra...
¡SORPRESA!
¿Qué era todo aquello? ¿Por qué estaban todos sus amigos reunidos en la base de Eggman y celebrando con confeti, serpentinas y globos? ¿Era una fiesta de cumpleaños?
"¡Feliz cumpleaños, Sonic!" dijeron todos al unísono.
Sonic empezó a sentir que las fuerzas le abandonaban y se sentó en el suelo. Todos estaban allí: Tails, Knuckles, Amy, Big, los Chaotix, Cream, Cheese, Vanilla, e incluso Silver y Blaze. También estaban allí ya Shadow, Rouge y Omega. Todos se habían reunido para darle la mayor de las sorpresas. No pudo evitar que se le saltasen las lágrimas de la emoción. No se habían olvidado de él después de todo.
"Felicidades," dijo Sage. "Te preguntarás qué hacen todos aquí."
"Pues sí," dijo más tranquilo. "La verdad es que me sorprende que hayan decidido celebrarlo en un lugar tan atípico como este. No me malinterpretes pero, ¿por qué aquí?"
"Padre estaba un poco deprimido porque ambos cumplen años el mismo día casualmente. Entonces planeé que tus amigos podían celebrarlo aquí para que no se sintiera tan solo. Tails estuvo de acuerdo y no le pareció mal. La única forma de evitar que sospecharas era que te sintieras rechazado por tus mejores amigos y pensaras que se habían olvidado de hacerte una fiesta. Para atraerte, la única forma era hacerte creer que uno de tus amigos estaba en peligro."
"Tails," dijo Sonic. "Tú y yo tenemos que hablar más tarde."
Tails soltó una pequeña risita incómoda.
"Lo siento, Sonic," dijo apenado. "Era la única forma de sorprenderte. Cada vez es más difícil guardarte un secreto. Perdónanos."
"Que sepas que yo me oponía a hacerte una cosa tan horrible," dijo Amy cruzándose de brazos. "Me pareció una broma muy cruel hacerte pensar que no nos preocupamos por ti y que te íbamos a dejar solo en el día de tu cumpleaños."
"Gracias, Amy," dijo con una pequeña sonrisa avergonzada. "Supongo que al chico al que te referías era Silver, ¿no? Lamento haberte gritado de aquella manera en tu casa y salir corriendo sin dejarte hablar. Pero me sentí traicionado y... hui como un cobarde. Lo siento."
"No te preocupes," dijo abrazándolo. "Sabes que siempre estaremos a tu lado. Nunca te dejaremos, ni siquiera en tus peores pesadillas," guiñándole un ojo cómplice.
"¡Felicidades, Carahuevo!" dijo al fin saludando a Eggman. "Esta victoria es tuya."
"¡Felicidades, Rata azul! Ahora, ¡qué empiece la fiesta!"
Aquel había sido el día más extraño de toda su vida, pero estar rodeado al fin de la gente que la compartía con él día a día era el mejor regalo de cumpleaños que podía haber recibido nunca. No podía ser más feliz por estar acompañado de todos sus seres queridos, y guardaría cada momento con ellos como un tesoro en un lugar muy especial de su corazón.
En esta historia planteas un cumpleaños en el que los amigos del protagonista no se acuerdan de que es el cumpleaños del protagonista o en su defecto les da igual, algo visto en varias series, mientras a la vez hay una traición que me recuerda un poco a la traición que sufre personaje protagonista X en esos fanfic de traición y venganza (con la excepción de la ultima parte).
ResponderEliminarLa historia es interesante, pero haces un Sonamy que abarca por poco la mitad de la historia, es algo a lo que no estoy acostumbrado pero no es un problema, el problema lo dejo para un poco después, si pudiera ponerle una calificación seria 9/10.
En conclusión, la idea del cumpleaños desastroso es buena, considero que Tails esta excelente. Pero para mi falla en que aquí esta Sonic The Celoso, no estoy acostumbrado a una trama de amor como esta pero note a Sonic hiper celoso, aunque supongo que es normal.
Aun que después de todo considero que hiciste un gran trabajo en esta historia y eso es de reconocer.
¿Realmente piensas que Sonic está celoso porque ama a Amy, o es que sólo teme que le quiten a su mejor amiga y la aparten de él? ;) Ahí te lo dejo.
EliminarPues más bien pensaba que Sonic ama a Amy pero no quiere comprometerse y a la vez no soportaría que alguien que no es el la haga feliz.
EliminarPero si me lo pones así diría la segunda opción. Pero no lo entiendo, si Amy tuviera novio eso no hace que se alejen ¿no? O ¿te refieres con apartar que no este en momentos especiales como su cumpleaños?
Obviamente no le haría el mismo caso, sobre todo, si no es de su mismo grupo de amigos. Después de tantos años, ¿no sería extraño para él no tener más la atención de Amy? ¿Cómo te sentirías si uno de tus mejores amigos/as prefiriese quedar en vez de ir a tu cumpleaños?
EliminarY, tal vez, en el fondo, Sonic haya desarrollado algo más profundo hacia ella con los años. Pero eso sólo lo sabe él en el fondo de su corazón. 😉
Entonces Sonic no quiere que un cualquiera se quede a su mejor amiga, y se sintió ofendido cuando su mejor amiga prefiere quedar con cualquier persona antes de presenciar como su mejor amigo cumple un año más.
EliminarAunque creó que Sonic solo soportaría que el mismo Sonic saliera con Amy. Aunque cuando se pone a divagar pensando que Shadow salía con Amy, pensaba que estaba celoso porque de los 3 erizos que existen se queda con el que peor le cae y no con él.
Creó que Sonic tiene la confianza de que Amy si llega a quedar con alguien no durara, hasta que encuentre a alguien que la haga feliz y lo que sentía por Sonic se quede en un amor infantil imposible.
¡Jajaja! Al final he escrito perfectamente a Sonic, pues ya no sabes si lo que siente es amor o una amistad muy profunda hacia Amy. Ni SEGA ha escrito a Sonic tan ambiguo como yo. Creo que me merezco un 10/10.
EliminarTú ganas, después de esta conversación has ganado un punto extra, has conseguido una puntuación perfecta 10/10.
EliminarPor una historia entretenida, un Tails que me sacaba alguna sonrisa, y el Sonic más ambiguo que he visto nunca, felicidades, esta historia me atrevería a decir que es la mejor de momento de calendario.
Gracias 🥰
Eliminar